Os cuento un poco como está hecha. La base es un bizcocho de vainilla y canela de 20 cm y 10 cm de alto. Como normalmente sale un poco de copete arriba, esta vez no lo corté, aproveché la disminución para hacer la forma del cuello. La cabeza es un bizcocho de chocolate de 12 cm y 8 cm de alto, también aproveche el copete para hacer la forma de la cabeza. De esta forma utilicé todo el bizcocho, lo único que hice fue suavizar los bordes para que no se notaran al dar la crema. Cada bizcocho dividido en cinco capas, el de vainilla relleno de ganache de chocolate, mermelada de fresas casera y fresas frescas y el de chocolate relleno de crema de merengue de fresas. Una vez rellenos, y cubiertos de crema de merengue, coloque uno encima de otro y para que quedaran bien fijos atravesé ambos con dos pajitas grandes. Por último he añadido más crema en la unión de los bizcochos para formar el cuello y disimular la unión. En Instagram podéis ver algunos de los pasos, bizcochos, relleno,..
Ahora viene la parte más divertida y es hacer que se parezca al Pollo Pepe con los detalles en fondant. Un par de patitas, las alas, la colita, los ojos y el pico. Sin olvidar el maíz, que el pollo Pepe come mucho. ¿ Se parece o no ?
La tarta resultante rica y jugosa, dos tartas en una, para repetir porción. Una señora tarta, casi 40 cm de altura, una auténtica layer cake. Ademas los niños encantados, que yo me como el pico, yo quiero un ala y yo la pata.
Bueno, el Pollo Pepe se despide con su inocente mirada. Espero que os haya gustado.
Buen fin de semana a todos los golosos.
